DECIMOQUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO

 

1ªLct:Dt.30,10-14:El mandamiento está muy cerca de ti, cúmplelo.

Sal.68,14.17.30-31.33-34.36ab.:Buscad al Señor y vivirá vuestro corazón.

2ªLct:Col.1,15-20:Todo fue creado por Él y para Él

Evangelio: Lc.10,25-37:¿Quién es mi prójimo?

 

Al escuchar este fragmento del Deuteronomio podríamos decir que  este es el precepto de la ley natural impreso en todo corazón humano: «no hagas a otro lo que no quieres que  te hagan a ti», «haz el bien y evita el mal». Sin embargo cuando Moisés se dirige al pueblo para recordarle este precepto natural introduce un acento especial. «Escucha la voz del Señor tu Dios», «conviértete con todo el corazón y con toda el alma». Hace alusión a la fuente de donde brota este agua viva, la gracia, y la fuerza para vivir: el Señor y la responsabilidad del hombre inclinado al mal. «Este precepto no te excede ni es inalcanzable, no está en el cielo ni más allá del mar». «El mandamiento está muy cerca de ti: en tu corazón y en tu boca. Cúmplelo. Por eso el fiel israelita ha de orientarse hacia Dios y hacia su corazón: «Dios mío que me escuche tu gran bondad, por tu gran compasión vuélvete hacia mi», «yo soy un pobre malherido». Así que el creyente recibe este motivo: «buscad al Señor y vivirá vuestro corazón».

El apóstol Pablo en la carta a los Colosenses nos acerca al misterio de la persona  de Jesús glorioso :»imagen de Dios invisible»,” primogénito(primer engendrado) de toda criatura», «todo fue creado por él y para él».»El es la cabeza del cuerpo :de la Iglesia». «Él es el primogénito de entre los muertos». Jesús el Hijo de Dios hecho hombre , probó el sufrimiento de la humanidad, cargo sus pecados, bajo al sheol, lugar de los muertos, probó la soledad ,el abandono y la lejanía de Dios. Por la sangre de su cruz «quiso reconciliar consigo todos los seres, los del cielo y los de la tierra». Restauró, reconcilió la creación entera. Y en Él, en el crucificado y resucitado «quiso Dios que residiera toda la plenitud».

Jesús «que vino no a abolir la ley sino a darla plenitud» responde a quien le quiere poner a prueba si es un maestro auténtico o una excepción extravagante dentro del pueblo de Dios, formulándole una pregunta radical, vital de todo existir :»Maestro qué he de hacer para heredar la vida eterna?»¿Qué he de hacer para ser feliz?¿Cuál ha de ser mi máxima aspiración para ser dichoso?. Jesús le devuelve a su propia vida: «Amarás a tu Dios con todo tu corazón ,con toda tu alma y tus fuerzas, con todo tu ser y al prójimo.» ¿Quién es mi prójimo?» Jesús por medio de una parábola le dice cómo se realiza este mandamiento principal y quién es el prójimo(próximo, cercano, el que está a mi lado). Una humanidad herida y descarriada :»unos bandidos dejan medio muerto a un hombre». Pasan dos representantes del culto y de la ley(sacerdote y levita) que afirman amar a Dios y lo niegan dando un rodeo para no querer saber nada de aquel suceso desagradable, mientras que un samaritano, «un pagano», «un extraño», «enemigo de los judíos», lo cura, se encarga de él y lo lleva a una posada. Una explícita denuncia a cuanto de egoísta e interesada pueda ser mi, nuestra vivencia de la fe.  Jesús precisa  :»Practicó la misericordia». Con palabra ardiente le dice a su interlocutor: «Anda ,haz tu lo mismo.

Jesús concreta «el contenido de prójimo»: es alguien que necesita de mi» y lo amplía: todos los necesitados sin distinción  alguna son nuestros prójimos.

La Iglesia que anuncia y celebra a Jesucristo como fuente inagotable de salvación considera que su  vida y sentido es prolongarse en la misericordia y la caridad con los necesitados. El cuadro de Esteban  Murillo en el que  aparece Santo Tomás de Villanueva, agustino  y arzobispo de Valencia dando limosna a los pobres ,refleja la entraña pastoral de la fe que se predica, se celebra y se realiza en la caridad .Cáritas parroquial, diocesana, nacional e internacional  no es un adorno o exhibición de la Iglesia sino que es un manantial del amor de Jesucristo. Toda una multitud de voluntarios y consagrados son cabeza, manos, pies y corazón de Dios para nuestros hermanos pobres, para quien nos necesite . La estadísticas de la Iglesia de España, de la diócesis de Bilbao, y de la parroquia son indicadores de la comunidad cristiana atendiendo a los pobres…. Ahora lo que se trata es de interiorizar esta Palabra admirable de Dios.

“Señor, que muestras la luz de tu verdad a los que andan extraviados para que puedan volver al buen camino”,  «concede a los cristianos rechazar lo que es indigno de este nombre y cumplir cuanto en él se significa»; «que los que van a recibir estos dones crezcan continuamente en santidad»,» que cuantas veces celebramos este sacramento se acreciente en nosotros el fruto de la salvación.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

cinco − dos =

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies