JUEVES SANTO

 

          MISA VESPERTINA DE LA CENA DEL SEÑOR

 

1ªLct. Ex.12,1-8.11-14:Prescripciones sobre la cena pascual

Sal.115,12-13.15-16abc.17-18:El cáliz que bendecimos es la comunión de la sanagre de Cristo

2ªLct.:1ªCo.11,23-26:Cada vez que coméis del pan y bebéis del cáliz, proclamáis la muerte del Señor.

Evangelio: Jn.13,1-15:Los amó hasta el extremo.

 

En una ocasión les dijo Jesús a sus apóstoles : ”conviene que yo me vaya para enviaros uno Abogado, un Paráclito que os enseñe la verdad plena: os enseñará todas las cosas y os recordará todas mis palabras”(Jn-14,25)

Hemos escuchado la Palabra de Dios y cómo celebraban los judíos la fiesta anual de la Pascua, recuerdo, actualización, memorial de lo que uno día les aconteció a los judíos liderados por Moisés y liberados de la esclavitud de Egipto. En familia …un animal macho(cordero o cabrito)…» lo mataréis al atardecer y rociaréis las jambas y el dintel». ”Comeréis carne asada…panes sin fermentar y verduras. ”Ceñida la cintura y con bastón…comeréis de prisa”. Es la Pascua, el paso del Señor…

Esta pascua o paso del Señor, Figura o adelanto profético de la Pascua plena del Señor con el acontecimiento de lo que Jesús hizo en la última cena: Institución de la Eucaristía, del orden sacerdotal y del mandamiento del amor hasta el extremo, lo celebramos hoy en el SACRAMENTO DE LA EUCARISTÍA, en este año 2023.,en este día, en el hoy.

De alguna manera todos nos sentimos contagiados incluso por el ambiente exterior  de lirismo, cofradías y procesiones(omitidas estos dos años)

Lo importante es que ahora nos dejemos abrasar por la palabra proclamada «pues Jesús ha deseado celebrar ardientemente esta pascua»… Todos y cada uno de nosotros, irrepetibles para Jesús, somos alcanzados por el Espíritu del Señor  resucitado que nos ha reunido en comunidad.

Por eso con agradecimiento y sentimiento hondo podemos exclamar:¡Cómo pagaré al Señor todo el bien que me ha hecho¡ Nos ha regalado a cada uno, aunque débiles y pecadores, la gracia de conocer a Jesucristo que ha dado la vida por amor hasta el extremo. Nos ha llamado amigos, nos ha lavado los pies y  nos ha dejado una señal :»Si yo os he lavado los pies…vosotros también…»Esta emoción contenida que intermitente nos ilumina y nos eleva, nos impulsa a vivir humildemente el talante y estilo de Jesús que «nos amó hasta el extremo». San Agustín en un bellísimo comentario al evangelio de S.Juan Sobre la plenitud del amor: «Amaos como yo os he amado…Nadie tiene mayor amor  que el que da la vIda por sus amigos…Cristo dio su vida por nosotros y también nosotros debemos dar la vida por los amigos…» cita el libro de los Proverbios:»…sentado a la mesa del Señor, mira qué te ponen delante. Pon la mano en ello pensando que tú has de preparar algo semejante…»( Así tantas personas hoy que cuidan de otras: de niños, ancianos, enfermos…Policías, médicos, madres…)No llegaremos como Jesús en  su libertad…quien en el momento de morir MATÓ EN SÍ MISMO A LA MUERTE(Tratado 84,1-2 CCL 36,536-538…Liturg.de las horas II,p.372). Los mártires al derramar su sangre mostraron que habían tomado de la mesa del Señor.

En el esplendor solemne de la Institución de la Eucaristía y del mandamiento del amor Jesús constituye a los apóstoles sacerdotes en la Nueva alianza con una palabra de poder y de unción. HACED ESTO EN MI MEMORIA.

En esta tarde-memorable cena de tu Hijo-confía a tu Iglesia el banquete de su amor, sacrificio nuevo de Alianza Eterna…que la celebración de los santos misterios nos lleve a alcanzar la plenitud el amor y la vida. Concédenos participar dignamente…pues cada vez que celebramos el memorial de la muerte de tu Hijo se realiza la obra de la salvación. Que la cena de tu Hijo que nos alimenta en el tiempo, llegue a saciarnos un día en la eternidad de tu reino..

DOMINGO DE RAMOS

DOMINGO DE RAMOS  2023 CICLO A

HOSANNA AL HIJO DE DAVID

MT.21,1-11:¡BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR¡

Hemos escuchado el fragmento del evangelio de S.Mateo en que se nos describe la entrada de Jerusalén, una entrada triunfal, alborozada, feliz pero a lomos de una borrica con su pollino como expresión de una actitud humilde de quien es el Mesías que nada tiene de pretencioso como potencia amenazante de los caballos carros y carretas de guerreros. Así es la sencillez pacífica de Jesús que ahora despierta gritos de júbilo y alegría:¡Bendito el que viene en nombre del Señor¡¡Bendito el Hijo de David ¡Viva el Altísimo¡Y luego la gente preguntando pero ¿Quién es éste? Otros decían :Es Jesús el profeta de Galilea ¡

Al realizar este ejercicio procesional, como recuerdo de lo que hace tantos años sucedió en un minúsculo país del mundo, Israel, que como cualquier anécdota de la vida pudo caer en el anonimato de los siglos , nosotros, ahora ,hoy de Dios, que estamos por gracia en el camino cristiano creyente, mientras hacemos el movimiento físico de caminar somos animados por el Espíritu de Jesús a volvernos a preguntar. Pero ¿Quién es este Jesús de Nazaret?¿Qué pretendía con sus palabras y gestos, a veces provocadoras y desconcertantes que le llevarán a la condena y a la muerte de cruz? ¿Qué digo yo de É?¿Qué confieso y proclamo porque he sido tocado y afectado por su persona?¿Porqué hay también otras personas que confiesan lo mismo que yo?¿Quién es Jesús para el mundo? ”Decid a la hija de Sión: Mira a tu rey que viene a ti humilde”.

                                   

  LITURGIA DE LA PALABRA

1ªLct.:Is.50,4-7: No ocultó su rostro a insultos y sé que no quedaré avergonzado.

Sal.21,8-9.17-18ª:Dios mío, Dios mío ¿por qué me has abandonado?

2ªLct.:Flp.2,6-11: Se rebajó a así mismo,por eso Dios lo levantó sobre todo.

Evangelio. Pasión según S.Mateo 26,14-27,66.

      DIOS LE DIO UN NOMBRE TODO NOMBRE

Fue traicionado por uno del grupo de discípulos, Judas. Durante la cena de despedida, instituye la Eucaristía y el Sacerdocio y explica lo que acontecerá: ”derramar su sangre para el perdón de los pecados”. En Getsemaní, durante una oración angustiosa y violenta doblegará  su voluntad humana ante el Padre antítesis de la lucha que Jacob sostuvo en la noche con el ángel para doblegar su voluntad y le diera su nombre.

Jesús ,que en otras ocasiones se escabull´´o de la asechanza de sus enemigos, pasando con una dignidad asombrosa ante ellos(“no había llegado su hora” porque ”nadie me quita la vida sino que yo la entrego),ahora sí, se deja apresar para que se cumplan las Escrituras. Y se manifiesta como el enviado de Dios, el Cristo y el Hijo del hombre Majestuoso y Transcendente que viene con gloria. Pero Pedro, uno de los íntimos, el amigo, niega y reniega de Jesús  por miedo a los judíos. También Pilato, desconcertado y oportunista lo muestra como el Ecce Homo, indefenso, justo y sin embargo lo condena porque le piden:¡crucifícalo¡¡crucifícalo¡. Y así fue de cruel, lo llevaron al Gólgota y lo crucificaron entre dos malhechores, con este argumento escrito en la cruz: ES EL REY DE LOS JUDÍOS.

Y ahora sí de nuevo el escarnio y la asechanza tentadora :”Si eres el Hijo de Dios, baja de la cruz…Recordáis la proposición del tentador en el alero del templo: “Arrojate de aquí porque vendrán a sostenerte los ángeles…?. O «a  otros ha salvado, que se salve a sí mismo…Las mismas tentaciones: cuando ante la muerte de Lázaro alguien exclama …»y uno que ha abierto los ojos a un ciego no podía haber impedido que muriera éste? «…O el rico epulón que desde el infierno clama porque envíen algún profeta que alerte del peligro a sus familiares y Abraham responde: «ni aunque resucite  un muerto le creerán.” ”Si no creéis en mí, creed en mis obras”. El Padre  y Jesús su Hijo, ante el mal y el pecado del mundo, no reaccionan con potencia y violencia anulando  la libertad del hombre, sino cargando con el peso del mal y del pecado  . Jesús había asumido así este destino de muerte  e interiorizando su soledad y desconsuelo clamó: ”Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? y como el justo injustamente perseguido también, confiando en el Padre,:”Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu “.Y junto a este desenlace he aquí que un centurión,un extranjero al ver todo aquello exclama: ¡Realmente éste era Hijo de Dios¡…que si bien no pudiera ser una todavía una confesión  explícita de la divinidad de Jesús, reconociendo su inocencia y su perdón para los que le sacrifican,es un esbozo , una expresión contenida de energía que será la futura confesión de fe de tantos creyentes:Jesús es el Hijo de Dios,el Señor,el Mesias Salvador.

Quisiste, Señor, que nuestro Salvador se hiciese hombre y muriese en la cruz para mostrar una vida sumisa a tu voluntad…que su pasión nos sirva de testimonio y un día participemos en su gloriosa resurrección. Por la pasión de tu Hijo se propicio(favorable, inclinado al bien) a tu pueblo. Que la celebración que actualiza el único sacrificio de Cristo, danos la misericordia que no merecen nuestros pecados. Fortalecido por los santos misterios .Esta súplica del mismo modo que la muerte de Cristo nos ha hecho esperar lo que nuestra fe nos promete, que su resurrección nos alcance la plena posesión de lo que anhelamos

QUINTO DOMINGO DE CUARESMA

QUINTO DOMINGO DE CUARESMA

 

1ªLct.:Ez.37,12-14:Os infundiré mi espíritu y viviréis

Sal.129,1-2.3-4ab.4c-6.7-8.:Del Señor viene la misericordia y la redención copiosa

2ª Lct.:Rm.8,8-11:El Espíritu del que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en vosotros.

Evangelio: Jn.11,1-45:Yo soy la resurrección y la vida.

 

A Jesús lo hemos contemplado en el desierto de las tentaciones ordenando a Satanás: ”al Señor tu Dios adorarás y a él solo darás culto” pues “no sólo de pan vive el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”

Lo hemos contemplado transfigurándose ante sus amigos a quienes mandó: ”no contéis a nadie esta visión hasta que el Hijo del Hombre resucite de entre los muertos”.

En el tercer domingo de cuaresma Jesús  dirigiéndose a una mujer samaritana a quien ayuda a cambiar su vida desordenada le ofrece :”Si conocieras el donde Dios y quién es el que de pide dame de beber, le pedirías tú y el te daría agua viva”.

El domingo pasado desde el estupor y la sorpresa ante un ciego a quien devuelve la vista, Jesús nos enviaba a la última dimensión de nuestra vida: reconocerlo como el Hijo del Hombre, enviado por Dios. Así: ser creyente es “ver con ojos nuevos”

Hoy contemplamos a Jesucristo realizando un signo portentoso .Después de  asistir al duelo y llanto de la familia por la muerte de su amigo Lázaro y después de haberse conmovido llorando también él, gritó con voz potente: “Lázaro, ven afuera”. Le devolvió la vida a quien de nuevo volvería a morir, como a la hija de Jairo o al hijo de la viuda de Naim.  Devueltos a la vida pero volverían a morir. Como las curaciones, signos poderosos de la presencia del Reino de Dios y barrunto de una nueva creación así será la resurrección de la carne feliz y gloriosa que no podemos imaginar pero sí soñar desde del asombro de los signos y de la autoridad de la Palabra creíble  de Jesús. “Yo soy la resurrección y la vida ,el que cree en mi aunque haya muerto vivirá”

“Muchos judíos habían venido a casa de María al ver lo que había hecho Jesús creyeron en él”.

Una visita a los hospitales siempre supone una cura de humildad para nuestras arrogancias y altanerías. La enfermedad grave nos sobrecoge. Recuerdo el combate espiritual librado por una joven que en un accidente de coche había quedado tetrapléjica. Con qué fe suplicaba a Jesús su curación y cómo después de una oración intensa quedaba tranquila y serena. Al poco tiempo murió habiendo donado sus órganos para ser trasplantados a otros necesitados.

Admiramos a los médicos que con estudio e ingenio investigan la naturaleza humana para conocerla e imitarla y aplicar sus descubrimientos al campo de la salud. Pero hemos de reconocer que nuestro organismo enfermo llega un momento en que no puede dar más de sí, ya no sirve como maravilloso instrumento para contener nuestra alma humana y nos morimos.

Había una niña de 10 años que  con un tumor cerebral decía : “mamá, me confieso y luego dejadme morir”. La misma niña , por la noche, suplicaba a su mamá que llamase a la Hermana Adoración para que la acompañara porque temía que al dormirse se muriera y ella quería vivir. Anhelamos  una vida plena.

Jesús que nos ha llamado amigos con todo su corazón “no puede impedir que muriera este”, que mueras tú, que muera yo. Nos morimos .La amistad con Jesús que nos muestra sus llagas gloriosas como señal de los clavos y del sufrimiento nos indica el camino del morir “para resucitar con El””…pues el que resucitó de entre los muertos a Jesús vivificará vuestros cuerpos mortales por el mismo espíritu que habita en vosotros”

Así como este mundo maravilloso es fruto de acción creadora de Dios,  nuestro cuerpo glorificado será fruto de la acción recreadora de Dios. Acogemos las palabras de Jesús a Marta y las interiorizamos: “-Marta, si crees, verás la gloria  de Dios” ,”el que cree en mi aunque haya muerto vivirá”. El diálogo de gracia de Dios vivo con el creyente va a pasar  de ser sostenido en el tiempo carnal y visible a la eternidad del amor eterno y espiritual.”El verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, hemos contemplado su gloria ya en la tierra y seremos “alabanza eterna de su gloria en el cielo” 

Señor, que vivamos siempre de aquel mismo amor que movió a tu Hijo a entregarse a la muerte por la salvación del mundo.

CUARTO DOMINGO DE CUARESMA

DOMINGO CUARTO DE CUARESMA

 

1ªLct.:1º de Samuel 16,1b.6-7.10-13ª:David es ungido rey de Israel

Sal.22,1-3ª.3b-4.5.6:El Señor es mi Pastor nada me falta.

2ªLct.:Ef.5,8-14:Levántate de entre los muertos y Cristo será tu luz.

Evangelio: Jn.9,1-41:Fue ,se lavó y volvió con vista.

 

Este cuarto domingo de cuaresma,- en la tradición litúrgica, “domingo Laetare, domingo de la alegría” porque el camino de la cuaresma penitencial nos lleva a la Vigilia de la Resurrección de Jesucristo que vence a la muerte y al dolor-; nos sitúa hoy para escuchar la Palabra de Dios como lámpara para nuestros ojos y luz en nuestro sendero(Sal.119,105). Podemos cantar en esta Alegre mañana que , “saludamos el gozo de la luz que nos llega resucitada y resucitadora”. Nueva luz, nuevos ojos para el creyente que gratuitamente ha recibido la fe, la iluminación, el bautismo en Jesucristo  

Pepe había sido un joven vitalista, desenfadado que a la edad de 40 años había comenzado a perder la vista hasta quedar completamente ciego .El Señor lo puso en el camino de mi ministerio sacerdotal para acompañarlo en el combate espiritual en que se encontraba y combatir con él en Jesucristo. Recibió una visita especial de un obispo santo que lo confortó y el día de la visita Pepe junto con sus padres hermanos y sobrinos se pusieron de fiesta porque era algo especial aquella visita. En algunos momentos de nuestra conversaciones hasta hacía ejercicio de un sano humor. Otro amigo sacerdote ciego, me confió que a duras penas terminó la carrera sacerdotal quedando ciego.Al principio los golpes que me daba contra puertas y ventanas suponían una gran humillación hasta llegar al equilibrio y serenidad. Impartía muchas tandas de ejercicios espirituales y se le veía “feliz y contento”. Otro sacerdote, Mauro, ciego ya al tiempo de jubilarse junto con José Luis el día de Sta Lucía, patrona de los ciegos celebraban la Eucaristía para los ciegos y en la homilía hasta bromean diciendo que “eran invidentes  transitoriamente” porque esperaban volver a ver y verse en el cielo. ¡Qué acción de gracias los que todavía vemos¡

Hemos escuchado un elocuente evangelio en el que el Señor cura a un ciego.A los que maliciosamente le  preguntan por su nueva situación, el que antes era ciego, responde: sólo sé antes que yo era ciego y ahora veo”.

En esta misma expresión adivinamos todo un mundo cargado de dramatismo en los que no ven y el regocijo y estupor de quienes recobran la vista pudiendo acoger la maravilla de la luz, los colores ,la vida plena.

Un dramaturgo español del siglo pasado , Antonio Buero Vallejo, decía que para definir a Dios la luz es su preferida. Dios es como la luz. Jesús dijo: Yo soy la luz del mundo. En algunos de sus dramas se sirve de algún ciego para describir la realidad humana y el grito de esperanza que late en el corazón. Una reconocida pintora de nuestros días Isabel guerra, monja cisterciense, en sus cuadros pone de relieve la luz y la paz que brotan de las personas que pinta. Luz ,paz, alegría, gozo, fe, visión  esperanza, creación sonora en este domingo “Letare” que nos acerca a la celebración de la Pascua y llena de sentido al itinerario penitencial de la Cuaresma camino de la Resurreción del Señor .

El drama de aquellos judíos, la ceguera de los  mismos encarnando un mundo oscuro de tinieblas se ve en el enfrentamiento con Jesús, luz del mundo. Y comienzan por no aceptar lo evidente, lo que se ve: alguien que no veía ahora ve, pues intuyen que Jesús, autor de signo realizado, les remite a Dios y les llama a convertirse a volverse a Él, aunque se manifiesta su resistencia y oposición: ”vino a los suyos y no lo recibieron”

Las palabras, los gestos, los silencios de Jesús, referidos a la vida ordinaria de los hombres nos trasladan ,a su vez ,a otro plano de la existencia donde recibimos luz, sentido, orientación, gracia. En ese mundo invisible de la luz y de la vida, el creyente aprende a ver más y mejor a interpretar, a caminar en la luz y en la verdad. Aprende a “ver desde su no ver” puesto que Dios, el mundo espiritual, lo invisible no cabe en la mirada limitada de la persona humana.  De ahí la posibilidad de la fe tentada  por la incredulidad y la incredulidad tentada por el «quizá sea real el mundo de lo invisible», de Dios, de la fe.

En el fragmento del Primer libro de Samuel hemos escuchado como después de pasar los siete hijos apreciaba que ninguno de ellos era el elegido sino el último David. Samuel tenía la visión acertada de quién iba a ser ungido e invadido por el Espíritu de Dios

 ¿Qué dices del que te ha abierto los ojos? Que es un profeta. Jamás se oyó decir que nadie que le  abriera los ojos a un ciego si éste no viniera de Dios.

Y luego, lo más sorprendente :¿Crees tú en el Hijo del Hombre?¿Quién es para que crea en Él? Jesús le contestó: El que está hablando ése es. Y he aquí otra gran revelación para el nuevo vidente. De la visión física es ascendido a la visión y confesión de la fe en aquel hombre-divino, Jesús que le ha curado.

El creyente vive una experiencia de relación con Dios de quien parte la iniciativa y a la que responde  con su confianza. Decimos  que ser creyente cristiano es una gracia, un don que se coge en liberad y se ejercita con esperanza y amor 

Me contaba uno compañero de estudios que tuvo un amigo ciego que le confiaba que “veía por dentro” ,había aceptado su condición y se movía con gracia y libertad en la vida.

¿Cuál es el testimonio de nuestra fe? Después de lo que he vivido ,del encuentro con tantos creyentes y tantas personas honradas estimo que lo definitivo es conocer a Jesucristo que me revela al Padre y al Espíritu Santo y me enseña amar ,a perdonar, que me consuela y nada puede llenarme de tanta felicidad como El.

San Pablo en el fragmento de su carta a los Efesios resume la gran catequesis sobre la fe cristiana y el bautismo, sacramento de la iluminación. Antes erais tinieblas y ahora sois luz. ”Caminad como hijos de la luz en bondad, justicia y verdad

“Despierta tú que duermes, levántate de entre los muertos y Cristo será tu luz”.

Se trata de “ver no como los hombres en apariencia sino como Dios  que ve el corazón”

Ilumina nuestro espíritu con la claridad de tu gracia para que nuestros pensamientos sean dignos de ti y aprendamos a amarte  de todo corazón.”

Ayúdanos a celebrar estos santos misterios con fe verdadera y saber ofrecértelos por la salvación del mundo.

TERCER DOMINGO DE CUARESMA

TERCER DOMINGO DE CUARESMA

1ªLct.:Ex.17,3-7:Danos agua para beber.

Sal.94,1-2.6-7.8-9:Escucharemos tu voz, Señor.

2ªLct.:Rm.5,1-2.5-8:El amor de Dios derramado en nuestros corazones.

Evangelio: Jn.4,5-42:Un surtidor de agua que salta  hasta la vida eterna.

 

El relato del libro del Éxodo describe la situación desesperada de los israelitas y Moisés “que se mueren de sed” tentando a Dios con una pregunta inquietante:”¿Está o no está el Señor en medio de nosotros?.¿No es verdad que en nuestro foro interno en alguna ocasión, en situaciones dolorosas ha pasado por nuestro corazón esta misma pregunta? La presencia del mal sacude la conciencia del hombre que no puede controlar ni dominar lo que es causa del sufrimiento y ardorosamente busca respuestas.

“En un lugar como éste, las palabras fallan; al final, sólo puede haber un silencio seco, un silencio que en sí mismo es un grito de corazón a Dios: ¿Por qué, Señor, permaneciste en silencio? ¿Cómo pudiste tolerar esto?”, expresó Benedicto XVI el 28 de mayo de 2006.

San Pablo en el fragmento de la carta a los Romanos se muestra contento, justificado, lleno de gracia, porque “el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones con el Espíritu Santo que se nos ha dado”.Y lo que se le ha pedido es “creer” ”la fe”.A la tentación de ¿Está o no está el Señor en medio de nosotros?, S. Pablo responde que lo asombroso de nuestro Dios, la prueba de que Dios nos ama y está con nosotros-algo inaudito  e inesperado -es que siendo injustos y pecadores, un justo, Jesús, murió por nosotros” .Por eso:” Venid, aclamemos al Señor, no endurezcáis el corazón porque El es  nuestro Dios”.

La paciencia y la intercesión de Moisés ante Dios, su liderazgo y pastoreo con el rebelde pueblo de Israel encuentra su perfección en Jesús tal como hoy lo muestra en el Evangelio. 

El encuentro de Jesús con la samaritana ha dado ocasión a los escritores espirituales para unos sabrosos comentarios y lúcidas interpretaciones. San Agustín ve en la mujer samaritana la figura de la Iglesia aún no santa que recibe el don del Espíritu Santo, el agua viva.Y además es figura de la Iglesia de pueblos extranjeros, no judíos.

Nosotros mismos en este tiempo de cuaresma, de conversión y penitencia, de escucha asidua de la Palabra de Dios nos sentimos sorprendidos por este diálogo en que captamos el sentido pedagógico de Dios y de Jesús que conduce suavemente a la persona al ámbito de la fe que salva.

Jesús, Dios sediento de agua y necesitado de ayuda para beber desafía los imponderables de la convivencia y se dirige a una mujer, samaritana, enemiga de los judíos.

Atravesado este primer umbral,  haciéndola caer en la cuenta de la realidad de la sed y la necesidad de beber le impulsa a reconocer otra necesidad no menos real que la anterior reprimida o camuflada entre deseos, desdenes, autosuficiencias que desvían la atención:” Si conocieras el don de Dios y quién te dice dame de beber, le pedirías el agua viva”.

Así es nuestra condición humana. Vemos la realidad inmediata, nos conformamos con lo que entra por nuestros sentidos que en tantas ocasiones también nos engañan en su apariencia hasta que otras personas nos ayudan a descubrir los matices y detalles de la realidad. Nos ayudan a conocer mejor la vida, su riqueza. ¡Cuánto no debemos a nuestros padres, maestros, gentes de bien.

Jesús lleva a la mujer hasta el fondo de sí misma, le ayuda conocerse y a reconocerse ,y al convertirse y  cambiar, al experimentar convirtiéndose y fiándose la exclamación sublime:”¡He visto al Mesías¡”.

Da testimonio de la visto, creído y experimentado y sus convecinos también se sienten sorprendidos: ”ya no creemos por lo que nos dices sino por lo que vemos”.

Jesús, hoy también está aquí presente resucitado aunque velado bajo tantos signos y símbolos eucarísticos: palabra, pan, vino, color, vosotros mismos, yo mismo…

Hemos de reconocer que cautivados por lo inmediato ,somos perezosos ,nos resistimos al mundo de lo invisible porque nos supone esfuerzo.

Seguramente que hemos oído hablar de los pescadores de perlas que se lanzan hasta el fondo en el agua que tira de ellos hacia arriba. Ellos bucean y bucean e intentan con gran esfuerzo llegar hasta el fondo para pescar una perla que los llena de alegría y                 satisfacción.

El camino creyente a veces se hace fatigoso pues nos resistimos a ir donde el Señor nos quiere para hacernos felices dándonos el agua viva. De ahí que nos ofrece el don del Espíritu Santo.

Pedimos al Señor nos ayude a realizar la experiencia de caminar con El siendo restaurados por su misericordia. Haz, Señor que cada uno nos convirtamos en surtidor d agua que salta hasta la vida eterna. Que se haga realidad en nuestra vida lo que hemos recibido en este sacramento.

 

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies