SOLEMNIDAD DE NUESTRO PADRE SAN AGUSTIN
1ªLct.:Hech.2,47-47:Vivían todos unidos y lo tenían todo en común
Sal.83,2-6.11.:Dichosos los que viven en tu casa ,Señor.
2ªLct.:2ªTim.4,1-8:Proclama la Palabra, insiste a tiempo y a destiempo.
Evangelio. Jn.10,7-18:El buen pastor da la vida por las ovejas
En el fragor del combate espiritual que San Agustín sostiene en su interior , percibe una voz que le anima y tonifica :”LÁNZATE TRANQUILO QUE EL TE ACOGERÁ Y TE SANARÁ.»
Por eso, conmovido por el Espíritu Santo que afecta a su corazón con las palabras de S. Pablo:” revestíos de Nuestro Señor Jesucristo; mediador, Dios y hombre, humilde, Agustín después de tanta fatiga intelectual y moral da rienda suelta a sus lágrimas, expresión de liberación interior y sanación de su persona turbada y herida.
Se siente renovado y colmado y ve cumplida la palabra de Jesús: ”he venido para que tengáis vida abundante y vida en plenitud”.
Porque Agustín, norteafricano, de temperamento apasionado, llegó ,con ingenioso análisis, hasta el fondo de su corazón y su deseo para diagnosticar el anhelo de toda persona humana: AMAR Y SER AMADO Apasionadamente buscó la Verdad ,la Belleza. y la Bondad y por la gracia de Dios se sintió perdonado, curado, sanado por la Sabiduría complaciente de Dios.
Mas su encuentro con Jesucristo se verificó en el seno de la Iglesia, cuerpo de Cristo, signo o sacramento de Cristo, pueblo de Dios. Así Mónica, la madre creyente y audaz ,empuja a su hijo Agustín al encuentro con el gran obispo de Milán Ambrosio quien a su vez lo envía al anciano sacerdote Simpliciano para prolongar y profundizar la enseñanza del misterio cristiano. Este santo sacerdote testifica la conversión de dos grandes magistrados romanos Victorino y Pablo quienes habían descubierto que la vivencia cristiana se realiza en el seno de la comunidad eclesial.
San Águstín se sentirá feliz en el interior de la Iglesia como madre. Su participación en la liturgia y los cánticos de la iglesia de Milán le llevarán a llorar dulcemente y le harán sentir nostalgia de la eternidad y a soñar con la Jerusalén celeste, la ciudad de Dios
Desde la vivencia de la amistad fundará comunidades fraternas y se pondrá al servicio de la Iglesia por la insinuación del obispo Valerio. Estará siempre dispuesto a sacrificar la contemplación por el apostolado.
Adivinamos que este Pastor de la Iglesia, apasionado por la verdad, se sintió fascinado por la Sabiduría de Dios manifestada en Cristo Maestro por el camino de la interioridad y la contemplación. Amador de Dios en Jesucristo presente en su Iglesia peregrina hacia la Jerusalén celeste.
Nos ha legado que a través de la amistad y la comunidad, seamos testigos de Jesús que ha venido para que tengamos vida en abundancia y plenitud. Y que sirvamos a la humanidad la fe cristiana que gratuitamente hemos recibido pues ”toda la obra de nuestra vida consiste en curar los ojos del corazón para ver a Dios
”¡Qué alegría estar juntos , cantar y alabar al Señor, de recordar el misterio de su pasión ,muerte y resurrección .Si el solo esperarle es causa de alegría que será el poseerle.
Cuando cantamos aleluya se transforma nuestro espíritu y es como participar en la felicidad de la ciudad celestial, la nueva Jerusalén.”
Un año más ,al recordar lo que tantas veces hemos oído acerca de S.Agustín, le pedimos al Señor “nuevos impulsos de vida para seguir creyendo” en comunidad
de vida a ejemplo de la comunidad de Jerusalén y anunciando el Evangelio en comunión con la Iglesia que nos ha dado la fe.