MANUEL MORENTE(1886-1942)

MANUEL GARCIA MORENTE(1886-1942)

Lunes, 12 de Enero de 2009

 Aquella mujer que asistía al curso de verano para propagandistas de Acción Católica en torno al sacerdote Manuel García Morente había recibido un toque de atención:¡Cuidado con tu feminidad ¡En cuanto estudiante de Ciencias exactas , una actitud matemática y lógica que lleva al espíritu humano al descubrimiento de la verdad rigurosa y que coloca en la pista hacia Dios, podría también encerrarte en un riguroso, exacto y frío pensamiento racional y calculador. Hablar de feminidad implica desarrollar la dimensión humana del sentimiento, la intuición, la cordialidad. La rica personalidad humana que no se limita a la estricta racionalidad matemática es sazonada y complementada por el sentimiento, la confianza, la fe, la alegría

A Manuel García Morente ,ilustre jienense ,en su itinerario profesional y humano lo vemos moverse con desenvoltura y agilidad académica en la filosofía de Kant y en la fenomenología de Husserl y más tarde, no sin dificultad, asimilando el pensamiento de Aristóteles y Sto.Tomás que le permitirán reflexionar, razonar ,comprender y expresar los contenidos de la fe cristiana vertidos en un lenguaje filosófico aristotélico tomista. También Gabriel Marcel sufrió cuando al prepararse para recibir el bautismo y ofrecérsele el Catecismo romano se encontró con un lenguaje filosófico y teológico que le resultaba frío y difícil.

Nacido en Arjonilla, Jaén el 22 de abril de 1886,hijo del Dr.García Corpas, oculista, fue enviado a estudiar a Bayona(Francia),obteniendo la Licenciatura en Letras por La Sorbona. Posteriormente estudiaría en Marburgo, Belin y Munich lo que nos pone en la pista del conocimiento que tiene de la filosofía alemana.

A los 24 años años obtuvo la cátedra de Ética en la Universidad Central de Madrid .En 1926 llegó a ser Decano de Filosofía y Letras así como Subsecretario de Instrucción pública. Tradujo del alemán las tres Críticas de Kant.

El proceso de su conversión lo encontramos narrado en una carta dirigida en septiembre de 1940 a Monseñor José María García Lahiguera, hecha pública después de su muerte

Recibió la triste noticia del asesinato de su yerno el 28 de agosto de 1936 en Toledo cuando estaba entregando el Decanato al Sr.Besteiro, su sucesor. Comenzó a caer sobre sus espaldas un aluvión de preocupaciones familiares y recibió una confidencia por la que supo que su vida también se estaba amenazada. Tiene que salir urgentemente de España llegando a Paris el 2 de octubre “con setenta y cinco francos en el bolsillo”.

“Llegué a París sin dinero y con el alma transida de angustia y de dolor y además corroída por preocupaciones de índole moral.¿Había hecho bien en abandonar mi casa y a mis hijas y ponerme egoístamente a salvo?“Una señora viuda de un antiguo compañero de estudios de la Sorbona le proporcionaba la comida y un amigo, Dn.Ezequiel de Selgas, una habitación ara dormir.

 

Noches de insomnio se sucedieron en aquella vida del Dr.García Morente .A finales de enero de 1937 recibió una carta de la Editorial Garnier que le proponía la confección de un diccionario francés –español .A mediados de marzo recibió un cablegrama de Buenos Aires en el que se le ofrecía la cátedra de Filosofía en la Universidad de Tucumán. Así creyó solucionar la situación económica de su familia .Pero le quedaba por resolver el problema que había surgido en el momento en que sus hijas salían de España. Este asunto se complicó y con él se retrasaba la partida para Argentina. Esto le descorazonó y le deprimió. Pero después de haber dejado vagabundear a su imaginación “se me ocurrió la idea de que era insensato dejar a la imaginación rienda suelta para que caminase sin rumbo ni orden…Era preciso pensar ordenada y metódicamente..El resultado fue: desde que empezó la guerra yo no había intervenido ni poco ni mucho en mi propia existencia. Mi vida, los hechos ,se habían hecho sin mi ,sin mi intervención.¿Quién o qué o cuál era la causa de esa vida, que siendo mía no era mía? Por un lado mi vida me pertenece pero por otro lado esa vida no me pertenece, puesto que su contenido viene en cada caso producido y causado por algo ajeno a mi voluntad. No encontraba yo a esta antinomia más que una solución: algo o alguien distinto de mí hace mi vida y me la entrega, me la atribuye, la adscribe a mi ser individual .El que algo a alguien distinto a mi haga mi vida, explica por qué mi vida ,en cierto sentido, no es mía .Pero el que esa vida, hecha por otro ,me sea como regalada o atribuida a mí ,explica en cierto sentido el que yo la considere como mía. Ante la gravedad de estos problemas me quedé perplejo y como desconcertado”

El don de la razón y de la inteligencia bien usadas, van hallando un sentido en la agitada reflexión de nuestro amigo pero una noche “Se me ocurrió poner en marcha la radio para ayudarme a la distracción .Estaban radiando música francesa: final de una sinfonía de César Frank; luego al piano, la Pavane pour une infante défunte de Ravel; luego,en orquesta ,un trozo de Berlioz intitulado L´enfance de Jésus. No puede usted imaginarse lo que es esto, si no lo conoce: algo exquisito suavísimo, de una delicadeza y ternura tales ,que nadie puede escucharlo con los ojos secos. Cantábalo un tenor magnífico ,de voz dulce, aterciopelada, flexible y suave que matizaba incomparablemente la melodía pura, ingenua, verdaderamente divina. Cuando terminó cerré la radio para no perturbar el estado de deliciosa paz en que esa música me había sumergido .Y por mi mente empezaron a desfilar imágenes de la niñez de Ntro -Señor Jesucristo. Vile en la imaginación caminando de la mano de la Santísima Virgen…Seguí representándome otros períodos de la vida del Señor…Poco a poco se fue agrandando en mi alma la visión de Cristo, de Cristo hombre clavado en la cruz .Y los brazos de Cristo crecían, crecían y parecían abrazar a toda aquella humanidad doliente y cubrirla con la inmensidad de su amor”.

Este es Dios, ese es el verdadero Dios, Dios vivo; ésa es la Providencia viva-me dije a mí mismo.-Ese es Dios que entiende a los hombres, que vive con los hombres, que sufre con ellos, que los consuela, que les da alimento y les trae la salvación.“

“Permanecí de rodillas un gran rato ofreciéndome mentalmente a Ntro Señor Jesucristo con las palabras que se me ocurrían buenamente. Recordé mi niñez; a mi madre que perdí cuando contaba nueve años .Recordé trozos del Padrenuestro. También puede restablecer el avemaría .Pero de aquí no pude pasar .El Credo se me resistió así como la Salve y el Señor mío Jesucristo. En el relojito de la pared sonaron las doce .La noche estaba serena y clara. En mi alma reinaba una paz extraordinaria”

“Volví la cara hacia el interior de la habitación y me quedé petrificado .Allí estaba El. Yo no lo veía, yo no lo oía, yo no lo tocaba .Pero él estaba allí.¿Cómo es posible esto ?Yo no lo sé Pero sé que él estaba allí presente y que yo sin ver ni oír, ni oler ,ni gustar, ni tocar nada, le percibía con absoluta e indubitable evidencia.¿ Cömo terminó la estancia de él allí? Tampoco lo sé. Terminó. En un instante desapareció. Una milésima de segundo antes estaba él aún allí y yo le percibía y me sentía inundado de ese gozo sobrehumano que he dicho. Una milésima de segundo después, ya él no estaba allí ,ya no había nadie en la habitación”.

Al día siguiente tomó la resolución de hacerse sacerdote. El día tres de mayo recibió carta de que sus hijas ya estaban en Barcelona. Preparándose para realizar un retiro en la Abadía de Ligugé le anunciaron la inminente llegada de sus hijas y nietos a París .El día 9 de junio tuvo la alegría inmensa de abrazar a sus hijas y nietos.

Salieron hacia Buenos Aires donde llegaron el 10 de julio y el 17 a Tucumán. Empezó las clases y conferencias y ganaba mucho dinero. A los 11 meses se despidió de la universidad y regresó a España. Después de confesarse y recibir la comunión el 10 de septiembre ingresaba en el Convento de los Padres Mercedarios del Poyo y comenzaba su preparación para el sacerdocio.

Falleció en Madrid el 7 de diciembre de 1942 siendo sacerdote y habiendo recuperado su cátedra de Etica.

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